Los probióticos son uno de los suplementos que nos ayudan a digerir los alimentos que consumimos y a procesar los productos de desecho. Llevar una dieta sana y equilibrada y complementarla con probióticos nos puede ayudar a mejorar nuestra salud y también nuestro estado de ánimo. Hoy os vamos a explicar cuáles son las virtudes de este tipo de probióticos y qué variedades podéis encontrar en el mercado.
Probióticos para el estómago:
Para el estómago están indicadas las especies de probióticos basadas en Lactobacillus y Bifidobacterium que se ingieren con algunos productos lácteos (yogures, yogures de soja, kéfir etc.) o como suplementos alimentarios. Esta ingesta moderada reequilibra la flora intestinal evitando o compensado afecciones del estómago y la digestión como las diarreas infecciosas, por ingesta de antibióticos o las gastroenteritis.
Probióticos vaginales:
Por su parte, la flora vaginal desequilibrada puede dar paso a las infecciones más habituales en la mujer como las cistitis, las vaginosis bacterianas, las vulvocandidiasis y las vaginitis. Y para evitarlas, están pensados los probioticos vaginales que ayudan a compensar la microbiota vaginal.
Las causas de estas infecciones son variadas y van desde la alteración en el nivel de estrógenos que se produce con la menstruación hasta por la práctica del coito. También se puede provocar por la aparición de hongos, o por haber ingerido antibióticos o antifúngicos para curar otra infección. O incluso por llevar ropa íntima ajustada o no seguir una dieta equilibrada.