Una cucharadita de aceite de hígado de bacalao Carlson proporciona 1.100 mg de omega-3, incluidos EPA y DHA, que apoyan la salud del corazón, el cerebro, la visión y las articulaciones.
Obtenemos el bacalao ártico de la más alta calidad en la costa de Noruega utilizando métodos tradicionales y sostenibles. El mismo día que son capturados, nuestro bacalao nórdico es transportado a una instalación noruega altamente regulada para su procesamiento y purificación.
Para proteger la efectividad de los nutrientes que se encuentran en nuestros productos, Carlson emplea técnicas de fabricación que evitan el uso de calor, humedad y solventes excesivos para proteger el contenido de nutrientes.
El aceite de hígado de bacalao Carlson se embotella con un toque de antioxidantes y se le aplica una descarga de nitrógeno para eliminar el oxígeno y ayudar a prevenir la oxidación. Como todos los omega-3 de Carlson, la frescura, la potencia y la pureza están garantizadas.