Los ácidos grasos omega 3,6 y 9 son, básicamente, grasas “buenas” que sirven al organismo de muchas maneras diferentes. Dependiendo de los enlaces dobles que los compongan, se clasifican con una determinada numeración.
- El ácido Omega 3 posee un doble enlace en su estructura en posición 3 y también tiene poder antiinflamatorio y anticoagulante.
- El Omega 6, por su parte, presenta el doble enlace en la posición 6.El ácido linoleico es antiinflamatorio y previene la aparición de hemorragias y artritis. Además, también resulta muy eficaz para proteger el buen estado de la próstata y el hígado.
- El Omega 9 es un ácido graso monoinsaturado, con un único doble enlace en la posición del carbono 9. A diferencia de los ácidos esenciales, el cuerpo puede sintetizarlo. Dos de sus ácidos principales son el ácido erúcico, presente en la canola, y el ácido oleico, que se encuentra en uno de los pilares de la dieta mediterránea: el aceite de oliva.El consumo de estos aceites ayuda a reducir el riesgo de trastornos cardiovasculares y ataques cerebrovasculares. También resulta positivo para eliminar el colesterol dañino de la sangre.